Buenos Aires, dic 3 (ANP) – La Mesa de Enlace Agropecuaria tomó nota en Río Cuarto del malestar que pesa sobre los productores agropecuarios por el ajuste en los derechos de exportación adoptados por el gobierno de Alberto Fernández, aunque no definieron medidas o acciones a realizar en el futuro.

Entre los pedidos cursados por distintas ponencias de productores y ruralistas figuran evaluar la posibilidad de realizar un cese de comercialización de granos para rechazar subas impositivas, también hacer asambleas a la vera de las rutas, reclamar a la política que ajuste y también intar al gobierno a extender el pedido de «solidaridad económica» a sectores como la minería, petrolero, pesca y financiero. También se pidió continuar con estado de «alerta y movilización en el campo».

La asamblea encabezada por Daniel Pelegrina (SRA), Jorge Chemes (CRA), Carlos Achetoni (FAA), y Alejandro Buttiero y Marco Giraudo, respectivamente, en representación de CONINAGRO Córdoba, comenzó pasadas las 19 y deliberó por el término de casi tres horas. El mensaje fue claro, tanto de ruralistas como de productores, hay un rechazo al ajuste de las retenciones promovida por el gobierno de Alberto Fernández, hecho que lleva a achicar senciblemente los números del agro y pone en un brete la inversión en futuros cultivos.

En el comienzo del encuentro, Pelegrina, presidente de la Sociedad Rural Argentina, refirió que la producción se muestra con «angustia, desánimo e incertidumbre» ante la decisión del gobierno de Alberto Fernández de apostar, también junto a provincias y municipios, a un «impuestazo» para encarar el déficit que tiene el Estado.

«Vamos a dialogar pero no queremos que nos metan la mano en el bolsillo, esa es el espíritu», explicó Daniel Pelegrina en el marco de la asamblea.

Instó al sector a «no dejar las manos cruzadas, y ser proactivos, incluso a través de los medios de comunicación», y también a «soliciatar a las autoridades que hagan su trabajo: y que el ajuste tiene que empezar por la política». Agregó que «vemos una economía que no se entiende», con subas en retenciones, pero también en Ingresos Brutos de las provincias y en las Tasas municipales, por la caída del Pacto Fiscal.

«Con el nuevo ministro (de Agricultura, Luis Basterra), no hemos podido tener un diálogo a fondo, aunque pudimos repasar algunos conceptos con el propio presidente (Alberto Fernández): hace pocos días. Allí le explicamos el impacto que tiene una retención del 30% en la soja y del 12% para el resto de los granos», explicó Pelegrina.

También Carlos Achetoni, de Federación Agraria Argentina (FAA), comentó «no es bueno que siempre se le pegue de lleno al clavo más derecho o perdir un esfuerzo. Allí es bueno clavar el taco y decir las cosas como son. No es para amedrentar y enfrentar aun gobierno, sino para que se equivoque menos. Cada equivocación se traduce en menos productores».

Alejandro Buttiero, que representa a la cooperativa La Federación de Oliva y también miembro del Consejo Regional Córdoba de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), manifestó que «vamos a ser solidarios, no tenemos el corazón de piedra, pero hay que ser solidario entre todos, también la minería, el petróleo, la pesca y la renta financiera: ¿Y esos para cuándo?».

«¿Y la clase política nada? los que legislan, no hacen sacrificio», expresó Buttiero.

La ronda de comentarios por parte de la Mesa de Enlace estuvo a cargo de Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), comentó que «el problema que (mantiene el sector agropecuario con el gobierno de Alberto Fernández) hoy es de confianza: necesitamos alguna señal para saber si se dice la verdad. Hoy tengo las mismas dudas que tienen los productores».

Texto del documento firmado al término de la asamblea de Río Cuarto:

SOCIEDAD RURAL DE RÍO CUARTO
ASAMBLEA DE PRODUCTORES – VIERNES 3 DE ENERO DE 2020

1 – Se expresa el contundente rechazo a los derechos de exportación, cuyas últimas subas golpean fuertemente a todo el sector agropecuario y en especial al interior productivo. Esto, sumado al desdoblamiento cambiario, sólo provocará una fuerte retracción en la producción, atentando contra el empleo y la generación de recursos, a la vez que impactará directamente en la sustentabilidad del sistema, fundamental para el equilibrio social, ambiental y económico.

2) El sector agropecuario estuvo siempre a la vanguardia de todo compromiso para ayudar a superar las distintas crisis que ha vivido nuestro país, pero no se puede seguir sacando del mismo bolsillo. Menos aun cuando la suba en los derechos de exportación se anuncia en plena campaña agrícola, de resultados inciertos por los factores climáticos, dejando a numerosos productores con rentabilidad nula o negativa. Los últimos informes indican que en el último trimestre volvió a aumentar considerablemente la participación del Estado en la renta agrícola, representando ya un 60,4 por ciento.

3) La transferencia del campo al Estado se estima en alrededor de 180 mil millones de dólares en los últimos 18 años, observándose que este enorme aporte no fue utilizado para morigerar los índices más sensibles para la sociedad como la pobreza, la indigencia y el desempleo, o para mejorar los niveles de educación y salud públicas.

4) La Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva en el marco de la Emergencia Pública, recientemente sancionada por el Congreso Nacional (delegando en el Poder Ejecutivo facultades que son propias del Legislativo), implica un drástico ajuste y “expropiación solidaria” que saldrá de los jubilados, la clase media, las economías regionales y la producción en general.

5) Es imprescindible que el Estado se comprometa a achicar los costos de la política y bajar el gasto público. Mientras se agobia a los sectores productivos con una mayor presión tributaria, no se observan señales ni voluntad política de reducir los gastos en los tres poderes del Estado, tanto nacionales, provinciales como municipales.

6) Es imperioso conocer cuáles son los lineamientos económicos del Gobierno Nacional en el mediano plazo para tener un marco de previsibilidad no sólo en la producción agropecuaria sino en los distintos sectores motorizadores de la economía.

7) La necesidad de contar con reglas claras tiene que estar acompañada con el cabal conocimiento de las actividades de las distintas ramas de la producción por parte de las autoridades. En ese sentido, sonaron desconcertantes las declaraciones de la más alta investidura gubernamental cuando dijo que la producción de leche no tenía insumos dolarizados. Es necesario aclarar que el productor tambero sólo se lleva el 30 por ciento de lo que el consumidor paga en el supermercado y se estima que el 78 por ciento de los costos de un tambo están dolarizados.

8) Se mantiene el estado de alerta permanente con el acompañamiento continuo a nuestros representados. Al mismo tiempo, se propende a agotar todas las instancias de diálogo con el Gobierno Nacional para buscar soluciones que vayan más allá de la coyuntura.

9) Se solicita a la Mesa de Enlace Nacional que esté presente en todas las instancias de diálogo y participación posibles.

Por NP