Buenos Aires, oct 10 (ANP)- Un conjunto de quince entidades agrarias y agroindustriales advirtió sobre las consecuencias negativas que podría tener la aprobación “unilateral” por parte del Gobierno de la comercialización de la variedad de trigo transgénico HB4, que podría representar la pérdida de mercados externos, así como la “contaminación” del cereal, que sería “irreparable e irreversible”.

“Queda claro que el Ministerio de Agricultura debe asumir las responsabilidades de las consecuencias directas que pueden generar costos económicos y comerciales para todos los productores de trigo, así como para todos los eslabones de comercialización y transformación interna y de exportación”, alertaron las entidades.

Las bolsas de cereales y comercio de Buenos Aires, Bahía Blanca, Córdoba, Chaco, Entre Ríos, Santa Fe y Rosario, así como la Federación Agraria Argentina, CONINAGRO y Confederaciones Rurales Argentinas, entre otras entidades, sostuvieron que “el uso comercial nacional del trigo HB4 impactara en los precios y abastecimiento de trigo en el país”.

“El daño que se produciría al mercado de trigo argentino sería irreparable e irreversible, toda vez que la contaminación se propagará y la segmentación resulta inviable”, añadieron, además de señalar que “se pondría en riesgo los esfuerzos conjuntos (público / privado) realizados para consolidar nuevos mercados y expandir fuertemente las exportaciones”.

En ese sentido, remarcaron que “no solo se ponen en riesgo las exportaciones de trigo y harina, sino también de pellets, almidón, gluten, panificados, fideos y todos los productos del segundo procesamiento donde existen miles de pymes que actúan en esta cadena”.

Más allá de expresar su apoyo a la “ciencia nacional” y la “innovación tecnológica” y de no tener dudas de que “el trigo HB4 no tiene riesgos ambientales ni de salud pública”, las entidades señalaron que “llama la atención que el Gobierno decida de forma unilateral, sin consultar a los representantes de la cadena del trigo, la aprobación comercial”.

“Es nuestro deber económico y social defender a la cadena del trigo frente a riesgos comerciales que puedan ocasionarse”, indicaron, en referencia a que tanto el mercado mundial del cereal como el de harinas son “en su totalidad son no transgénicos, condición que los diferencian de los mercados de maíz, soja y algodón”.

Al respecto, resaltaron que “en varios países del mundo se intentó hace años lanzar eventos (transgénicos) en trigo que no pudieron prosperar debido a la reacción negativa de los mercados compradores”.

“Es por ello que esta aprobación reviste condiciones especiales y altamente riesgosas”, completaron.

Con una diversificación que en 2019 llegó a contar con exportaciones de trigo y harinas a 54 países, precisaron que se requiere que la Argentina “deba monitorear y aguardar la aprobación de eventos biotecnológicos en más de un destino relevante para nuestras exportaciones de trigo, únicamente en aquellos países que tienen marco regulatorio en la materia”.

“Por otra parte, el mercado argentino no tiene experiencia en consumir trigo transgénico, y ya existen pedidos de parte de empresas alimenticias nacionales e internacionales que operan en nuestro país, de comprar únicamente harina o trigo no transgénico”, aseguraron.

Otras entidades que suscribieron el reclamo son la Cámara de Industriales Molineros, el Centro de Exportadores de Cereales, el Centro de Corredores, la Federación Argentina de la Industria Molinera y la Federación de Centros y Entidades Gremiales de Acopiadores de Cereales.

 

Por NP