BUENOS AIRES (ANP).- El gobierno de China respondió duramente al enviado de Estados Unidos que visitó ayer Buenos Aires, el secretario del Tesoro Scott Bessent, quien se manifestó en contra de la línea swap que mantiene la nación asiática con Argentina.
En un comunicado, China reclamó que Bennet «no debería sabotear nuestra asistencia» a Argentina, al tiempo que manifestó su «profundo descontento y categórico rechazo a las maliciosas difamaciones y calumnias» realizadas por el funcionario estadounidense.
La visita de Bessent a Buenos Aires despertó gran euforia y expectativas, ya que se esperaba un préstamo para el país en línea con el voto de confianza del Fondo Monetario Internacional y de otros organismos multilaterales, o bien un anuncio contundente en materia de acuerdos comerciales y posibles exenciones a los aranceles recíprocos de EE.UU.
Pero para sorpresa de todos, la visita del Secretario del Tesoro se quedó en una calurosa felicitación y en un apoyo declamatorio para la gestión de Javier Milei, dejando planteado el interrogante de por qué razón uno de los funcionarios más requeridos y ocupados de la administración Trump viajaría hasta la otra punta del continente para ver en persona al mandatario argentino.
Sin duda, el viaje no fue meramente de cortesía, y Bessant dio un indicio al señalar que a medida que el gobierno de Milei mantenga las directrices de emisión cero y responsabilidad fiscal, el país pronto contará con suficientes entradas de divisas para poder pagar el swap que se acordó hace tiempo con China.
Al respecto, el gobierno chino sostuvo en su comunicado que «es falsa la afirmación sobre los acuerdos calificados de rapaces y las supuestas grandes cantidades de deuda en los que ha incurrido la República Popular China», mientras que subrayó que «lo que sí es verdad es que algunas personas con motivos encubiertos están intentando sembrar discordias en las relaciones sino-argentinas y sino-africanas».
Por último, el gobierno de Xi Jinping aseguró que acompaña a los países en desarrollo «sin imponer ningún condicionamiento político», solo para el bienestar de los pueblos, una ayuda que ha sido «muy bien acogida por los gobiernos y pueblos beneficiados».