BUENOS AIRES (ANP) .- La caida del precio de la soja, se ubicó por debajo de los US$ 350 millones la tonelada, “no se trasladó con toda su fuerza al mercado local, pero claramente tuvo un impacto” advirtió el analista en temas de agronegocios Dante Romano.
El profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral explicó a través de un documento que “los precios están en niveles que disuaden ventas de cosecha vieja, y ponen en riesgo la rentabilidad del nuevo ciclo”. En este marco, desde el sector ruralista “se despertaron voces pidiendo baja en derechos de exportación, pero parece difícil dada la situación fiscal”, dijo Romano.
También se refirió a la próxima cosecha de maíz, de la cual, entidades como la Bolsa de Comercio de Rosario habla de una caída del 20% en el área a sembrar “aunque algunos comentarios privados hacen pensar en 30%”.
“Hablamos de entre 40 y 45 millones de toneladas de maíz, cuando un año normal deberíamos estar en 53 millones, este ciclo con todos los problemas, estuvo en 46 millones”, advirtió Romano.
En su informe, sostiene que “la menor producción argentina no es tan relevante a nivel mundial, en un año donde Estado Unidos quedaría con stocks muy altos, y Brasil subiría en producción”. Además, en el país sólo se necesitan 15 millones para el consumo comercial, “y no hay exportaciones declaradas, mientas que las compras de la exportación son mínimas” por lo que “no podemos asumir una suba de precios”, a pesar de la menor producción local.
Finalmente, en el caso del trigo, “la cosecha del hemisferio norte está llegando a su fin y con ella la presión de oferta. Los datos a campo en Rusia marcan una producción con una merma de 10 a 12 millones de toneladas respecto del año pasado. Eso reduce la presión en los precios, ya que el ruso es el trigo más barato, y tendría menor oferta”.