BUENOS AIRES (ANP) La inflación de mayo tuvo un fuerte recorte respecto del 8,8% de abril, para quedar en un 4,3%, el menor registro desde enero de 2021, según las estimaciones dadas a conocer hoy por la Fundación Libertad y Progreso (LyP).
De esta manera, en los primeros cinco meses del año el IPC acumula una suba de 72,1%, en tanto la variación interanual alcanza el 276,9%, mostrando la primera desaceleración en 10 meses.
De acuerdo con el informe de LyP, la inflación núcleo se ubicó en el 4,8%, manteniendo la tendencia del mes anterior, aunque por primera vez en el año fue superior al índice general. Los regulados presentaron una suba del 4%, desaceleración que se explica más que nada por la postergación de los aumentos en electricidad, gas y combustibles, lo que hace prever a la Fundación que «en junio tendrá mayor incidencia la actualización de tarifas, con lo cual podría cortarse la desaceleración del índice de precios».
«Aún sin confirmación oficial de la actualización, no se puede cuantificar el impacto, aunque probablemente termine aportando algún punto adicional en sobre el IPC general. Por su parte, el incremento en combustibles no tendría una incidencia significativa en el próximo mes», explicó.
En la primera semana de mayo, la inflación fue de 1,7% semanal, ubicándose 4,1 puntos porcentuales por debajo de la primera semana de abril. A partir de allí, la inflación semanal se desaceleró hasta un 0,8% en la última semana. Con estos resultados, el arrastre estadístico para el mes de junio es de solo 1,4 punto porcentual.
«El dato pone al desnudo la fuerte desaceleración que han tenido los precios no regulados», señaló el economista jefe de la entidad, Eugenio Marí, para quien «esto hace ver como muy probable que haya una recuperación de los salarios reales en mayo, dado que están ajustando por una inflación pasada que es mayor».
Marí agregó que “al final del día la clave es que el gobierno no se aparte del equilibrio fiscal. Esto es lo que permitió cortar de raíz con el principal motor que empujó la emisión de pesos y la depreciación de nuestra moneda. El equilibrio fiscal también hace creíble que el Tesoro pueda hacerse cargo de su deuda, gran parte de la cual quedó en manos del BCRA, que emitía para financiar el gasto del Ejecutivo y luego tenía que rescatar esa emisión con pasivos remunerados”.
Por su parte, el economista Lautaro Moschet destacó que «en mayo, la inflación núcleo experimentó una disminución en comparación con el mes anterior», lo que sugiere que «el IPC podría estabilizarse en un rango del 4% al 5% en los próximos meses; incluso teniendo en cuenta que quedan pendientes algunos incrementos de regulados».