BUENOS AIRES (ANP) El sector agroexportador pasó a ser uno de los principales aliados del gobierno en su estrategia de terminar con el déficit fiscal, ya que los ingresos derivados del cobro de retenciones ayudaron en los dos primeros meses de 2024 a compensar la caída real de la recaudación de los tributos vinculados a la actividad económica interna.
Tal situación quedó reflejada en el informe dado a conocer hoy por la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), que anunciaron que en febrero las empresas del sector liquidaron la suma de U$S 1.499.345.762, con una suba del 133% en relación con el mismo mes de 2023 y una mejora del 92% en relación al acumulado de este año en comparación
con el primer bimestre del año pasado.
Si a esos incrementos se les añade la suba interanual de la cotización del dólar oficial, se llegará a la conclusión de los aumentos de la recaudación -en pesos- de los derechos de exportación.
Los datos relevados por CIARA-CEC indican que en el primer bimestre la liquidación de las agroexportaciones ascendió a US$ 3.021,7 millones, un 92,06% más que los US$ 1.573,3 millones embolsados en el mismo período de 2023.
De todos modos, los ingresos por liquidación de divisas son inferiores a los previos a la sequía, ya que en el primer bimestre de 2022 habían alcanzado los US$ 4.942 millones.
«El ingreso de divisas del mes de febrero es el resultado del nuevo régimen de dólar exportador y de los movimientos macroeconómicos del nuevo gobierno que impactan sobre las decisiones de venta de la oferta de granos», señalaron CIARA y CEC en un comunicado, en el que advirtieron que «la exportación de granos sigue trabajando con altos niveles de capacidad ociosa, así como la industria aceitera, padeciendo márgenes negativos permanentes».