En declaraciones radiales, la funcionaria señaló que «en campaña muchos dicen que van a ser firmes con los cortes pero a la hora de hacerlo se asustan», y enfatizó que si eso se repite en ese y otros órdenes, la situación no cambiará.
«Cuando uno toma la decisión tiene que ir para adelante. Si el país no se convence de que el cambio sea de fondo, se va a quedar a mitad de camino. Yo no estoy dispuesta a quedarme a mitad de camino”, recalcó.
La titular de la cartera de Seguridad también justificó el accionar de los efectivos como un medio de dispersión frente a los violentos. «Todo el tiempo nos prueban, quieren que nos pasemos del límite», acusó.
Asimismo, hizo hincapié en que no hubo manifestantes heridos a excepción de un hombre, que «se supo que no fue herido allí, sino que había sido robado en otro lado. Fue a tirarse en la plaza para simular que había sido ahí», aseguró.
La estrategia de la ministra fue respaldada fuertemente hoy por el Gobierno. El vocero presidencial, Manuel Adorni, fue el encargado de resaltar la «titánica tarea» de las fuerzas de seguridad.
En la habitual conferencia de prensa diaria, Adorni aseguró que en el Gobierno «no estamos dispuestos a que un grupo de violentos logre frenar un debate legislativo».