BUENOS AIRES (ANP).- La canasta navideña para los argentinos este año costará 240% más que en las fiestas pasadas, según relevamientos realizados por Focus Market.
En diálogo con CNN Radio, el economista y director de la consultora, Damián Di Pace, dijo que este fue el incremento promedio a partir de los datos recabados, y agregó que los artículos de decoración navideña tuvieron un aumento del 315% interanual.
«Este comportamiento de la microeconomía argentina está vinculada a lo que sucede en la macro, respecto en la formación de precios. No está exento esto de lo que transitamos los argentinos todos los días en materia de formación de precios, regulaciones e incertidumbre de lo que viene», definió.
Por otra parte, señaló que un elemento fundamental de la caja navideña, que es el azúcar, registró una suba estimada del 334% interanual promedio, frente a un avance del salario para el sector no registrado de un 94,7%, según las mediciones del INDEC.
Por lo tanto, subrayó que «aquellos que son más humildes o están en el eslabón más bajo o de clase media, les cuesta acceder a estos productos que son básicos».
Asimismo, explicó que en estos productos el impacto de la estacionalidad es muy fuerte ya que su exhibición en góndola coincide con un proceso electoral en el que los comerciantes no tienen claridad sobre el tipo de cambio para reponer el producto, la aprobación de la SIRA para conseguir insumos y materias primas, o el nivel de tasa al momento de asumir el nuevo presidente.
«La verdad que en Argentina es una enorme ingeniería poder formar un precio», afirmó.
En tanto, consultado sobre el dólar, Di Pace opinó que «sin lugar a dudas» el tipo de cambio se moverá la semana que viene, lo que plantea el interrogante de con qué valor se encontrarán las empresas para reponer los insumos para abastecer la demanda de Navidad.
«Me parecería extraño que esté subiendo el tipo de cambio mientras el presidente electo habla y eso implicaría una devaluación del 80%», consideró.
«Todos los precios ya están a ese dólar celeste porque hubo una formación previa para tratar de cubrirse frente a una eventual devaluación. Cuando se devalúa, inmediatamente esos costos se vuelven a disparar ante una eventual nueva devaluación. Por lo cual, Argentina es un loop permanente», concluyó.