BUENOS AIRES (ANP).- Las actuales estructuras representan un freno para el ingreso de dólares en la próxima década que provee el sector agrpoindustrial, por lo que se requerirá en los próximos años mejoras en los servicios de Hidrovía, el ferrocarril, en los caminos y accesos a los puertos, y llevar la internet y conectividad a toso los sectores rurales.
Así lo planteó el Consejo Agroindusrial Argentino (CAA) que reúne a las principales cámaras productoras y bolsas de cereales del país en pos de impulsar el Plan Federal Agroindustrial 2023/33.
En el caso de la Hidrovía plantea “una licitación internacional, veloz y eficiente. El punto clave radica en que debe instrumentarse a través de un contratante directo y no mediante una intervención estatizada”, que entre otras cosas se encargue del dragado de esa vía por donde sale el 60% de las exportaciones argentinas.
En cuanto a la infraestructura portuaria, “hay situaciones que rozan lo absurdo. Un claro ejemplo son los accesos a estas terminales, que en su gran mayoría están emplazados sobre caminos de tierra”.
En paralelo, “no debemos perder de vista la fluidez que proporciona el sistema ferroviario para la producción agroindustrial”. Para eso, desde la CAA solicitan la puesta en marcha del sistema Open Access Ferroviario –para las formaciones de carga que llegan a los puertos- “que permita incrementar y agilizar el transporte de productos e insumos agropecuarios y agroindustriales”.
El sistema ferroviario “tiene potencial para movilizar hasta un 25% de la producción granaria y transportar unas 15 millones de toneladas adicionales, llegando a 30 millones de toneladas. Para movilizar este volumen de granos, las inversiones necesarias serían de U$S 2.600 millones, para construir 75 plantas de acopio, desvíos ferroviarios eficientes e incorporar unos 8.500 vagones y 190 locomotoras, con el consecuente “beneficio a los productores regionales, ya que permitirá reducir los costos de fletes en forma significativa”.
A esto se le debe sumar “el acceso a internet y la conectividad rural, que con una inversión estatal de U$S 16 millones cubriría una superficie de 20 millones de hectáreas con máxima tecnología. Cada año, se pierden unos US$ 1700 millones en productividad agropecuaria, por el solo hecho de no contar con conectividad”, destacaron desde la CAA.