El desempeño del ministro de Economía, Sergio Massa, en su primer año de gestión muestra más puntos en contra que a favor en la comparación con el mismo lapso de sus predecesores, de acuerdo con un relevamiento dado a conocer hoy por la consultora Analytica, que deja en evidencia que tuvo los peores resultados en materia de inflación y reservas internacionales, unos de los peores en pobreza, salario real registrado y déficit primario y medianamente aceptables en tipo de cambio real y evolución del PBI.
«Los fríos números de la performance de Sergio Massa, comparada con otros momentos históricos, son discretos», señaló la entidad presidida por Ricardo Delgado y dirigida por Claudio Caprarulo que, de todos modos, plantearon como atenuante que fue el único que «asumió a un año de completar una muy pobre gestión presidencial» y que como Martín Guzmán «debió enfrentar las consecuencias macroeconómicas y sociales de la pandemia Covid-19, los efectos temporales de la guerra en Europa y la sequía».
Asimismo, Analytica advirtió sobre «los distintos momentos del contexto global», ya que «entre 1986 y 2002, la Argentina enfrentó un escenario internacional completamente distinto del actual» con tasas de interés mucho más altas y precios internacionales «mucho menos favorables».
«Sergio Massa en términos de actividad, salarios y pobreza está lejos del ideal. El desafío del ministro-candidato es mayúsculo en las próximas elecciones presidenciales, sobre todo si es el principal responsable de dar respuesta a las
demandas económicas de la sociedad», sintetizó Analytica, que analizó las gestiones de Massa, Guzmán, Juan Sourrouille, Domingo Cavallo, José Luis Machinea Roberto Lavagna, Axel Kicillof y Nicolás Dujovne en base a siete variables:
1.- Variación interanual del Producto Bruto Interno: Entre los siete ministros, Massa tuvo el quinto desempeño, con una caída del 1%, mpeño comparado, con una caída del 1%, similar al rendimiento de Machinea (-0,8%) y superior al de Kicillof (-2,5%) y Guzmán (-10%), aunque lejos de Sourrouille (12,6%), Lavagna (10,2%) y Cavallo (10%).
2.- Inflación: El peor resultado comparado, con 116%, superando a Sourrouille (51%), que, con el Plan Austral, consiguió frenar la fuerte inercia de los precios. En el otro extremo está la deflación de Machinea (-1%) que se dio en un contexto recesivo que, meses más tarde, concluiría en la crisis de la convertibilidad.
3.- Variación de las reservas internacionales brutas: También fue la peor performance, «algo lógico en un contexto de
sequía y un ajuste claramente insuficiente en el nivel de importaciones», acotó Analytica, que de todos modos advirtió que «el buen desempeño de Cavallo (+78%) y de Dujovne (+29%) no fue el resultado de una balanza comercial superavitaria, sino que obedeció, en el primer caso, a un ingreso extraordinario de recursos por la privatización acelerada de compañías estatales, y de un significativo endeudamiento externo con acreedores privados, en el segundo.
4.- Salario real registrado: En el sexto puesto, sólo superó a Kicillof (-2,9%) y Lavagna (-12%). En el otro extremo, se destacó la recuperación con Sourrouille (+10%), cuando la salida del régimen de altísima inflación -y posterior retraso cambiario- posibilitó que los salarios reales recuperaran poder de compra.
5.- Resultado fiscal primario acumulado: Sólo dos ministros tuvieron peores resultados que Massa. Guzmán (-6,4%), dada la fuerte suba del gasto público durante la pandemia, y Dujovne (-3,8%). Lejos queda el actual candidato presidencial de los superávits alcanzados por Cavallo (2%), Lavagna (1,7%) y Machinea (1%).
6.- Variación del tipo de cambio real: Massa (-0,3%) lo dejó casi en línea con la evolución de los precios (en cumplimiento del acuerdo con el FMI) y muestra un mejor desempeño que Dujovne (-4,3%), Cavallo (-16%), Lavagna (-24%) y Sourrouille (-32%), que apreciaron significativamente el peso en sus primeros meses de gestión.
7.- Tasa de pobreza: Aumentó 6,6 puntos en la gestión de Massa, sólo superado en la pandemia de Covid’19 en 2020, durante la gestión de Guzmán.