BUENOS AIRES (ANP) Una familia de cuatro integrantes que vive en un barrio popular del conurbano bonaerense necesitó en julio por lo menos $110.079,25 para comprar los alimentos básicos de subsistencia en los comercios de cercanía, lo que implicó un incremento mensual del 7,64%, que se elevó al 71,64% en el acumulado de los primeros siete meses de 2023 y al 118,36% en la comparación interanual.
Los datos forman parte del último informe del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCi), en el que detalló que los productos de verdulería lideraron los aumentos del mes (14,35%) y también los interanuales (178%), con subas en julio del 50% en las papas, 20% en las batatas y 11,11% en las manzanas.
Los productos de almacén se ubicaron en segundo lugar, con el 7,48% mensual y 125% interanual, mientras que las carnes continúan rezagadas, con un 3,41% en julio y 80% en los últimos 12 meses.
«Desde hace largo tiempo las subas de los alimentos son el motor de la inflación en general y de la CBT (Canasta Básica Total) en particular», señaló ISEPCi que, no obstante, advirtió que «desde fin del año pasado» los aumentos de las tarifas de gas, electricidad, combustibles, comunicaciones, transporte, mantenimiento del hogar, en muchos casos están por encima de los incrementos en alimentos.
De esa forma, la CBT trepó en julio a $245.476,73, más del doble de los $112.922,54 requeridos doce meses atrás.