El deterioro de las reservas internacionales del Banco Central es uno de los principales problemas que afronta la gestión económica del tándem Sergio Massa-Miguel Pesce y en la primera mitad del año acusan una caída de US$ 16.665 millones, de acuerdo con los datos provisorios dados a conocer hoy por la autoridad monetaria.
De esta manera, quedaron en un nivel provisorio de US$ 27.933 millones y hay que remontarse al 28 de enero de 2016 para encontrar un monto menor, es decir que están en el nivel más bajo en 101 meses.
El pago del vencimiento de US$ 2.700 millones con DEGs y yuanes dejó en evidencia la situación del Banco Central, sin dólares disponibles para hacer frente a ese compromiso e implicó una baja en el nivel de reservas de US$ 2.851 millones respecto del cierre de la víspera, según el informe provisorio de la entidad (el resultado consolidado se dará a conocer el martes 4 de julio).
El balance mensual arrojó un saldo negativo de US$ 5.078 millones, mientras que en lo que va de 2023 la pérdida alcanza a US$ 16.665 millones.
Desde la asunción presidencial de Alberto Fernández, el descenso de las reservas internacionales es de US$ 15.852 y respecto al récord de US$ 77.481 millones del 9 de abril de 2019, el derrumbe llega a US$ 49.548 millones, con un deterioro del 63,9%.