BUENOS AIRES (ANP).- La economista Diana Mondino señaló hoy que la meta de 3% de inflación vaticinada por el ministro de Economía, Sergio Massa, «dependerá de cuánta recesión tengamos», y explicó que los precios no están subiendo a tasas mayores porque el poder adquisitivo de los argentinos no alcanza para pagar incrementos exorbitantes.
En diálogo con el programa «Hora 10», de radio CNN Argentina, la experta subrayó que «los productos tienen componentes de insumo, mano de obra, impuestos y ojalá ganancia para el que produce. Si te suben los impuestos, te suben los salarios que mínimo debe ser el 60% respecto al año pasado, y lo mismo le pasa al que te vende insumos».
En este sentido, sostuvo que «es difícil que los precios bajen. La inflación no es por costos. El señor que tiene que vender y tiene aumentos de costos, ¿cómo hace? Es difícil decir cuánto va a ser la inflación», y aclaró que los precios «no suben al infinito porque nadie te los compra. Como los salarios en Argentina son una lágrima, no te alcanza para comprar todo lo que quisieras, entonces el precio no puede subir lo que el productor quisiera porque no se vende».
En este escenario, Mondino dijo que la posibilidad de que la inflación vaya bajando puede estar por el lado de la demanda, si bien recordó que también juega el componente de la política monetaria, «que todavía no es restrictiva».
En relación al comercio exterior, la economista expresó que «en Argentina tenemos una economía que se ha vuelto tan extremadamente restrictiva, donde solo se pueden obtener dólares, permisos o sistemas si estás de acuerdo con algún señor. Y eso no es estar de acuerdo: estás siendo extorsionado, subrayado y con negrita. Todos queremos que a Sergio Massa y a la Argentina les vaya bien, pero el tema son los mecanismos».
Como ejemplo de las consecuencias de las restricciones, puso como ejemplo las pérdidas derivadas de las dificultades que se registraron el año pasado para la exportación de vinos. «El año pasado hubo problema con el vino porque no se podían importar botellas. Y el costo de eso es minúsculo en comparación a todo lo que se pierde por no poder exportar vino. Pero si querías importar, te decían que no», indicó.
Asimismo, apuntó al riesgo del déficit cuasi fiscal, al que calificó como «un dragón de 10 cabezas». «El monstruo es que el gobierno emite dinero porque tiene déficit y no tiene como pagarlo. Lo usan para pagar sus gastos y después los recupera. El Banco Central dice ‘traémelo y te pago interés’. Esas son las famosas LELIQ. Entonces la tasa actual es del 100%», explicó. Además, Mondino remarcó que a la actual cantidad de LELIQS, el año próximo habrá que sumar otro tanto por los intereses.
«Pero el Banco Central no tiene fuentes propias de generación de recursos, entonces la única forma que tendría de pagar esos intereses es vendiendo sus reservas, que son poquitas; o emitiendo más billetes aún. Si para pagarlo va a tener que poner más dinero en la calle, es nueva emisión», advirtió.