Las cuentas de la Administración Pública Nacional mostraron en el primer trimestre un significativo desborde que compromete el cumplimiento de las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI), al punto que el déficit primario ascendió a $392.842 millones y aumentó un 678,1% en relación con el mismo período de 2021.
La información fue dada a conocer por la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) y se anticipa a la que difundirá el Ministerio de Economía el próximo 20 de abril.
La desmejora del resultado fiscal fue consecuencia de un alza nominal del 80,2% en los gastos totales y del 58,2% en los ingresos, que en términos reales (deducida la inflación) fueron respectivamente del 18% y del 3,6%.
El alza de los ingresos estuvo impulsada por los recursos tributarios que crecieron 2,3% real (56,3% nominal) aquellos provenientes de la Seguridad Social, que lo hicieron en 7,2% (63,7% nominal).
Los gastos primarios registraron un incremento real de 16,5% (77,9% nominal) en tanto los intereses de la deuda lo hicieron en 36,5% (108,5% nominal).
El incremento de las erogaciones primarias estuvo motorizado por las prestaciones sociales (9% real y 66,6% nominal) y los subsidios energéticos (90,1% real y 190,5% nominal), en este último caso por “la brecha creciente entre los precios de generación de la electricidad y las tarifas que paga la demanda”, explicó la OPC.
Ese aumento de los subsidios es uno de los ejes de la preocupación expresada por el FMI, que en el acuerdo de facilidades extendidas planteó la necesidad de una reducción real para atenuar su impacto fiscal.
No obstante, y a pesar del compromiso planteado, la Secretaría de Energía aún no a formalizado la convocatoria a una nueva audiencia pública para considerar un incremento adicional y segmentado al ya dispuesto en marzo, que en los hechos se tradujo en un aumento en términos reales.
Transcurridos los primeros tres meses del año, las cuentas de la administración nacional reflejaron un déficit primario de $392.842 millones y uno financiero de $659.926 millones.
Eso implica una desmejora del resultado primario del 409,3% real y 678,1% nominal, y del financiero del 141,9% y 269,5%, respectivamente.
En tanto, el déficit económico (ingresos corrientes menos gastos corrientes) fue de $420.965 millones, implicando un incremento real de 364,8% y nominal de 610,1%.
Al 31 de marzo los gastos totales ascendieron a $3.093.565 millones, equivalentes al 28,7% del crédito presupuestario vigente, que corresponde a la prórroga del Presupuesto del ejercicio 2021 de acuerdo con lo establecido en el Decreto 882/2021.
El nivel registrado resulta superior al alcanzado en el mismo período del año pasado, tanto para los gastos corrientes (30,1% vs. 21% en el primer trimestre de 2021) como para los gastos de capital (18,4% vs. 14%).
Durante el primer trimestre del año el crédito presupuestario prorrogado se aumentó en $655 millones y alcanzó los $10.776.605 millones.