BUENOS AIRES (ANP).- En tiempos de redes sociales y de sobreexposición de la intimidad no significaría gran cosa la difusión de un video pornográfico casero, pero no era así en 1997, y menos si la protagonista de la desprevenida pareja era la superestrella estadounidense de TV, Pamela Anderson.
La espectacular rubia, conocida mundialmente por su papel en la popular serie Baywatch, se había casado dos años antes con el baterista de Mötley Crüe, Tommy Lee, y como generalmente los videos íntimos en aquella época estaban a salvo, no tuvo mejor idea que grabar parte de su luna de miel. Sin embargo, poco después un empleado que trabajó en la casa del matrimonio robaría el comprometedor video, que no tardaría en ser difundido en internet. Y el resto es historia.
Aunque aquel escándalo ya quedó lejos en la memoria, la plataforma Star+ lo rescató del olvido y lo transformó en la miniserie que se estrena hoy en exclusiva, con una emisión de tres episodios a los que seguirá un capítulo por semana.
Protagonizada por Lily James, actriz de «Yesterday» y por Sebastian Stan («The Falcon & the Winter Soldier«), la miniserie de ocho episodios recreará los convulsionados días que vivió la pareja cuando no era nada común que el mundo entero viera lo que sucedía en la cama del vecino, aunque éste fuera famoso.
Para las nuevas generaciones, la propuesta sin duda será un acercamiento a un mundo que estaba naciendo a las mieles de la conectividad a toda hora y en todo lugar, pero también a sus trampas. Si alguno pensó que con los videos íntimos de Florencia Peña o Paris Hilton empezó el fin del derecho de los famosos a la privacidad, sabrán que hubo un apoteótico antecedente que revolucionó a los medios y marcó tendencia.