Buenos Aires, jun 24 (ANP) – Ya está prácticamente definido entre la mayoría de los empleadores que van a pagar el Sueldo Anual Complementario (SAC) en cuotas. Tan solo depende de cuantas según monto y sector. En el Estado nacional podrán ser hasta cinco, en la Ciudad de Buenos Aires hasta dos, y ayer la Unión Industrial Argentina (UIA) comunicó al gobierno que será en tres por lo menos.
Un empresario de la central fabril explicó que durante el encuentro que mantuvo el Comité Ejecutivo con el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, le pidieron que gestione ante su par de Trabajo, Claudio Moroni, que no le cobre las multas que fijan las leyes laborales cuando se produce un incumplimiento de ese tenor. Eso es porque no hubo posibilidades de hacer un acuerdo con la CGT para que toleren la medida.
El pedido es para las pequeñas y medianas empresas que están bajo el programa de ATP. No es para las grandes, que no estàn con ayuda del estado, pero que en principio, tendrían problemas o para pagar en término o de afrontar las penalidades posteriores.
Ayer, la central le pidió a Kulfas que el gobierno no se apure en retirar todo el andamiaje de subsidios y de créditos que las está sosteniendo en medio de la cuarentena. La campaña de «sensibilización» para las empresas y la sociedad en general ya fue lanzada a través de las redes sociales. Un video oficial de unos cuatro minutos, circula por las redes, donde el sustento es que la economía ya se está reactivando.
Se trata del mismo concepto que emite Desarrollo Productivo a través del Centro de Estudio para la Producción (CEP) en el cual se destaca que el 80% de las empresas en el país está habilitada para operar. El problema es que muchas pymes en el interior del país están ya en condiciones de trabajar en el marco de protocolos de Distanciamiento Social, pero todavía facturan apenas un 30% de lo que lo hacían antes de la pandemia. De igual modo, las empresas de la región AMBA que fueron declaradas esenciales que pudieron seguir trabajando, siguieron facturando a un nivel menor que antes de la pandemia. Es decir, la crisis económica que generó la cuarentena no va a cambiar a pesar de que se permita a mas empresas trabajar, porque todavía no se permite la circulación de personas y a su vez, estas vieron reducidos sus ingresos.
El apuro del gobierno por recoger la linea rápidamente se debe al explosiva emisión de dinero que está haciendo el BCRA para financiar al Tesoro. El Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) advierte que entre marzo y mayo el BCRA le pasó al gobierno 800.000 millones de pesos. Algunos economistas estiman que de mantenerse en ese nivel, la ayuda a fin de año puede equivaler a 10 puntos del PBI. algo que puede ser explosivo.